Mundo Espumante: ¿Cómo se hace un vino con burbujas? ¿Por qué está mal decirle Champagne? ¿Cuál conviene elegir para un brindis?



En esta nota compartimos información, consejos y curiosidades sobre la bebida por excelencia para realizar un brindis: el espumante.


  • ¿Cómo se hace un vino con burbujas? Existen dos procedimientos para elaborar espumantes: Charmat y Champenoise. En lo que difiere uno del otro es en el recipiente donde el vino realiza su segunda fermentación. Esta es la responsable de originar las burbujas y, por lo tanto, la que permite obtener estilos distintos de bebida. En el método tradicional o Champenoise, el vino realiza la segunda fermentación en la botella, en contacto con sus levaduras durante largos meses. Esto da como resultado un espumante más cremoso, con mayor volumen y aromas. En el caso del Charmat, la segunda fermentación se realiza en tanques de acero inoxidable, en los que el contacto del vino con las levaduras es menor, generando un estilo más fresco y frutado.

 

  • ¿Por qué está mal decirle “Champagne” a todos los espumantes?Champagne” es el término que se utiliza para los espumantes que provienen de la zona de Champagne, en Francia. Las variedades de uvas que los franceses utilizan para elaborarlo son el Chardonnay, el Pinot Noir y el Pinot Menier. En Argentina, se utilizan uvas provenientes de regiones propias o aledañas y, principalmente, son Malbec, Chenin o Torrontés.

 

  • ¿Qué espumante conviene elegir para un brindis?Queda a gusto de cada uno. Un aspecto importante a tener en cuenta es el contenido de azúcar. Hay paladares que prefieren un espumante más seco, otros son afines a lo dulce. Según su nivel de dulzor pueden ser:
    • Nature: posee menos de 3 gramos de azúcar residual.
    • Brut Nature: 0 a 7 gramos de azúcar residual.
    • Extra Brut: menos de 11 gramos por litro.
    • Brut: Menos de 15 gramos por litro.
    • Demi Sec: De 15 a 40 gramos por litro.
    • Dulce: Más de 40 gramos por litro.
    • Extra Dulce: más de 60 gramos de azúcar por litro.
    • Un espumante de tipo Nature, Brut o Extra Brut marida con un plato principal. En cambio, los dulces acompañan mejor a un postre. También, es un gran aperitivo por su delicadeza y elegancia, que lo convierten en el indicado para comenzar cualquier comida.

 

  • Tips para descorchar una botella sin que salga volando el corcho. Al contener gas carbónico, las botellas de espumantes demandan de cierta destreza al momento de la apertura. Lo importante es contener la presión del corcho para que este no salga despedido. Para eso, se debe quitar el bozal metálico de la botella con esta apoyada en la mesa. Con la mano derecha se sujeta la base de la botella y con la izquierda se afirma el corcho. Con movimientos cortos, pero fuertes se debe comenzar a girar el corcho hasta aflojarlo, sujetando la base. El resto del trabajo lo hará la presión del gas que los empujará hacia afuera.

 

  • ¿Cómo servir un espumante? Los espumantes deben servirse bien fríos, pero no helados. La temperatura ideal es de 6° a 8° grados. Para esto podemos enfriarlo en la heladera, pero una vez abierto necesitaremos de un recipiente – una frapera o balde con hielo y agua – para mantenerlo frio. A su vez, debe servirse hasta la mitad de la copa para que no pierda temperatura, ni gas carbónico. La copa puede ser la tradicional con forma de “flauta” o la que se utiliza para vino blanco. A diferencia de lo que sucede con los vinos tranquilos, los espumantes una vez abiertos conviene terminarlos.

 

Un espumante de calidad debe tener burbujas pequeñas, en columnas bien definidas, con una espuma persistente y efervescencia fina. Te invitamos a descubrir algunos de los siguientes exquisitos espumantes para celebrar en estas fiestas.